Bon appétit amig@s,

Sin leche ni mantequilla, sano no, sanísimo. A base de leche de almendras, ideal para personas intolerantes a la lactosa. Sencillísimo de preparar y sobre todo riquísimo, suave, esponjoso. Para “mojar” en el café o té vaya.

¡Qué buena merienda vamos a tener esta tarde!

Ingredientes:

-350 gramos de harina

-5 huevos

-150 gramos de azúcar

-250 ml de leche de almendras

-Una cucharada de esencia de vainilla

-Un sobre de levadura

-Almendras fileteadas

-Azúcar perlado

La elaboración de este bizcocho es muy sencillo. Solo tenemos primero que batir muy bien durante unos minutos- con ayuda de una batidora eléctrica mejor- los huevos enteros junto al azúcar hasta que aumenten de tamaño y tomen un color blanquecino. A continuación vertemos la leche de almendras, la esencia de vainilla y los integramos bien. También podríamos poner un poco de canela molida o incluso ralladura de limón- lo dejo a vuestra elección.

Tamizamos la harina junto a la levadura y los mezclamos delicadamente a los líquidos en tres tandas.

Solo nos falta ahora verter la masa en un molde bien engrasado y espolvorear por encima almendras crudas fileteadas y un puñado de azúcar perlado.

Truco: Si no tenéis azúcar perlado , podéis machacar en trocitos pequeños unos 2-3 terrones de azúcar.

Lo horneamos a 170 grados durante unos 45 minutos

Tuco: Si veis que a mitad de cocción ya esta dorado la parte superior del bizcocho, cubrirlo con un papel plata y así no se quemará.

¡Como huele! Delicioso, muy suave y nada seco- incluso al día siguiente.

Bon appétit Mama