Bon appétit amig@s,

Hoy manda la tradición y como es costumbre en época de “Semana Santa” y sobretodo en el día de “Todos los Santos” solemos hacer estos riquísimos buñuelos llenos de aire que se pueden comer así solos ó rellenos de una buena crema pastelera ó nata ó dulce de leche etc…

En estas fechas es muy frecuente encontrarlos en todas las pastelerías pero a precios desorbitados. Entonces ¿¿porqué no hacerlos en casa ??

Son dulces típicos, muy fáciles de hacer, con ingredientes de andar por casa, económicos y deliciosos. Si nunca los habéis hecho, os animo a hacerlos, os van a encantar.

Ingredientes :

Para los buñuelos:

180 ml de Leche

30 gramos de azúcar

75 gramos de Mantequilla

115 gramos de Harina normal tamizada

Pizca de Sal

4 Huevos (M)

Piel de limón y palito de canela

Para la crema pastelera:

2 Huevos

250 ml de Leche

35 gramos de Maicena

35 gramos de Azúcar

15 gramos de Mantequilla

Esencia de Vainilla

Para la nata:

200 ml de Nata para montar (mín. 35%)

2 cucharadas de Azúcar glas

Empezamos por preparar la crema pastelera para que le dé tiempo a enfriarse cuando vayamos a rellenar los buñuelos. Es muy sencilla, batir los huevos, el azúcar, la maicena y la leche. Poner al fuego suave y remover hasta espesar. Ya fuera del fuego añadimos la esencia de vainilla (en mi caso en polvo) y la mantequilla. Dejar tapado y enfriar completamente.

Para los buñuelos de viento, es la misma masa que haríamos para hacer los petit-choux (profiteroles). En un cazo ponemos la leche junto al azúcar,  la piel de limón y el palito de canela para darle un sabor extra. Dejamos hervir un par de minutos, los retiramos y añadimos la mantequilla. Una vez derretida volcamos de golpe toda la harina tamizada y una pizca de sal. Removemos bien, apagamos el fuego y seguimos removiendo hasta que se forme una bola que se despega de las paredes del cazo.

Pasamos a un bol y dejamos enfriar un par de minutos.

Toca ahora incorporar los huevos de uno en uno ( en mi caso necesite 4 huevos pero eran de tamaño M) . Se formará una masa suave formando el “pico de pato”.

En un cazo con abundante aceite de girasol caliente (unos 170 grados) depositamos porciones de masa ayudándonos de 2 cucharas de postre y dejamos que se fríen un par de minutos por cada lado.

Fritos los buñuelos y aún estando calientes, los rebozamos por azúcar.

Con ayuda de una tijera hacemos un corte para rellenarlos de una estupenda crema pastelera , nata ó lo que os apetezca.

Simplemente “volaron”, son una locura

Bon appétit Mama

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