Bon appétit amig@s,

Si hay un postre que suele gustar a todo el mundo, sin duda alguna, son las milhojas. Están deliciosas y las podemos preparar en casa sin apenas dificultad ya que podemos encontrar en los distintos supermercados estupendas hojas de hojaldre ó bien refrigeradas ó bien congeladas .

Aunque os recomiendo que elijáis una masa de hojaldre de buena calidad, de ello dependerá el éxito de vuestro postre.

Hoy me decido por unas milhojas que en mi casa “vuelan” de lo buenas que están: las rellenas de crema queso mascarpone con nata y coronadas de unas riquísimas frambuesas que les darán a este postre el toque ácido.

¡Vamos a ello!

Ingredientes:

1 ó 2 laminas de hojaldre

250 gramos de queso mascarpone

200 ml de nata para montar (min.35’1%)

80 gramos de azúcar glas

100 gramos de frambuesas frescas

Lo primero será preparar el hojaldre. Aquí podéis cortarlo en rectángulos individuales ó varios grandes ó en círculos tal como yo he optado. De una masa rectangular he sacado 9 círculos que he pinchado y espolvoreado con un poco de azúcar glas. Este paso es importante ya que el azúcar caramelizará sobre el hojaldre y así evitará que se reblandezca cuando le pongamos el relleno de crema. De esta forma podréis tener la milhojas facilmente bien crujiente un par de días en la nevera, si os dura tanto jaja.

Lo horneamos 10 minutos de un lado y 5 minutos del otro a 200 grados.

Para el relleno, en un bol semi-montamos la nata con la mitad del azúcar y en otro bol mezclamos el mascarpone con el resto del azúcar. Unimos las dos preparaciones y seguimos montamos hasta que esté bien firme. Con esta cantidad tenéis para hacer una milhojas grande o unas 12-15 pequeñas.

Rellenamos nuestros hojaldres con una generosa capa de relleno y decoramos con unas estupendas frambuesas. Yo me ayudé de una manga pastelera para formar unas bolitas de crema.

El resultado es espectacular y muy muy sabroso.

Bon appétit mama